El hombre del brazo de oro. Descubrió siendo adolescente que contenía un anticuerpo clave para evitar una mortal enfermedad hemolítica en recién nacidos. James Harrison, un australiano de a pie con una rutina que cumplió religiosamente cada dos semanas durante 63 años: donar sangre. La suya era muy valiosa y ha servido para salvar la vida a 2,4 millones de bebés de madres pertenecientes al grupo sanguíneo Rh negativo

https://www.elmundo.es/cronica/2025/03/05/67c859d5fc6c83d7708b4571.html